domingo, 21 de enero de 2007

¿Qué fue de los buitres?

Mi orgullo de mujer está herido, gravemente.

Yo siempre he odiado el colectivo buitre masculino, siempre me ha fastidiado mucho que cuando estoy con mis amigas tomando algo tranquilamente tenga que acercarse el enteraillo del lugar a rondar cuál abeja acude a la miel. A veces incluso he llegado a mosquearme-totalmente por este tema. Además que no fallaba, día que te apetecía ir en plan conversación-autista, día que al menos 2 grupitos de las citadas aves de rapiña nos avistaban como objetivo.

Y ahora, que no es que quiera, pero que no me disgustaría que me buitreasen un poquillo, con todos los hombres que se me acercan (o a los que yo me acerco) para aspectos insulsos de la vida como pedir un vaso, preguntar por un bar o por una banqueta, la conversación no dura más de 20 segundos!!! Ni un “hey qué tal?”, ni un “sois de aquí?”, ni ... NADA!!! Indiferencia total. Como si en lugar de una mujer joven extremadamente atractiva fuese un pies-negros (con todo el respeto).

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6 comments:

Anonymous Anónimo ha dicho ...

¡Y extremadamente modesta!

domingo, enero 21, 2007 3:41:00 p. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho ...

Ponte mas escote!!

lunes, enero 22, 2007 11:52:00 a. m.  
Blogger Maximus ha dicho ...

Distinguida señorita Perla:

Nunca me consideré especial defensor de las aves de rapiña nocturnas y urbanas que, a veces con incomprensible fortuna y otras -las más- protagonizando estrepitosos fracasos, sobrevuelan plazas y garitos pasada la medianoche a la caza de tiernas presas.

No oculto mi simpatía hacia la especie, si bien siempre he justificado, y así seguiré haciéndolo, el uso de armas de fuego contra estas aves invasoras, dentro y fuera de coto. No por diversión, sino por simple supervivencia.

Aún está por determinar si me encuentro entre tan milenaria especie o si bien pertenezco a esa otra, no menos rapaz y carroñera, que se considera a sí misma alejada del ecosistema en el que usted parece añorar los vuelos rasantes. Pero todos compartimos el mismo hábitat, y todos trabajamos, con mayor o menor perseverancia, en la sagrada tarea de perpetuar nuestras especies.

Más lejos que nunca de estar en peligro de extinción, el buitre negro y maloliente cuya baba está echando de menos, sigue amenazando a la cadena alimenticia, y para corroborarlo basta echar un vistazo a cualquier parte los fines de semana. Por lo que debo decirle que, en esta ocasión, supongo que el problema radica en usted...

Creo que expreso la opinión de más de uno al afirmar que habla de este asunto como si fuera una pelusa en la alfombra (esta frase es de Ania, de GH). Y creo no ser el único que con un "¿hey qué tal?" o un "¿sois de aquí?" consideraría estar haciéndose un flaco favor a sí mismo y al resto de su género, el masculino, en plena jornada de cacería. En otras palabras, somos muchos los que nos sentimos gilipollas entrando a una piba con las frases lamentables de siempre que de sólo mentarlas ya me avergüenzo... Años de investigación han servido de poco en la búsqueda de la frase definitiva. Llegando a la conclusión de que esa frase no existe, y optando en más de una ocasión por otras frases que, como digo, no voy a detallar por vergüenza, creo que no es justo lamentarse de falta de éxitos cuando no se facilita una sola pista a la población de rapaces hambrientas.

Por tanto, y en nombre de la población de rapaces irreversibles, no se admite su protesta. No sin hacer su propia aportación a años de estudio que, sin resultado, persiguen esa frase idónea con la que saludar, caer bien, conservar la dignidad y no delatar que tras de ese enorme pico carnívoro se esconde una cabeza sin cerebro.

Falconiformemente suyo.

martes, enero 23, 2007 11:23:00 p. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho ...

Tengo que confesar que el comentario de Maximus me ha encantado.
Creo que eres de las pocas chicas que conozco que admiten que les encantaría 'ser buitreadas' cuando en realidad (creo que) a todas os sube el ego que se os acerquen y os avisten como objetivo. ¿Me equivoco?

miércoles, enero 24, 2007 9:18:00 a. m.  
Blogger perla ha dicho ...

Estimado Señor Maximus:

Dado que no es la primera persona que me lo dice, cada vez me creo más que el problema radica en mí y no en los que rodean mi hábitat ... es más que probable. Por lo que desde mi punto de vista no existe una frase panacea que asegure el éxito de ninguna especie, carroñera o no, en este nuestro ecosistema, ya que la captura satisfactoria de una presa depende tanto de la estrategia del atacante como de la disponibilidad y nivel receptivo de la presa, que en mi caso no sé si no llegaba al punto óptimo o se pasaba ...

Retiro, pues, mi protesta. Porque como todos sabemos se trataba más de un deseo por escuchar elogios hacia mi persona (física y psíquica) que de un ataque a las incompletas y a veces (como comenta usted) vergonzosas e improductivas artes de la jamás extinta especie rapaz; y, dicho sea de paso, porque me quejo de vicio.

Tras mi escueta, nada innovadora, y evasiva aportación al tema, me despido atentamente.

Presiformemente suya.

En cuanto a lo que comenta Fran del crecimiento de nuestro ego al ser “blancos”, como ya dije, personalmente ha habido momentos en los que lejos de agradarme, me ha molestado sobremanera. Quizá la diferencia es que yo lo digo sin tapujos, tanto en un caso como en otro.

miércoles, enero 24, 2007 11:50:00 a. m.  
Anonymous Anónimo ha dicho ...

"Creo que eres de las pocas chicas que conozco que admiten que les encantaría 'ser buitreadas' cuando en realidad (creo que) a todas os sube el ego que se os acerquen y os avisten como objetivo. ¿Me equivoco?"

Yo creo que eso depende de "según quién". Y depende de cómo de gorda esté la vaca... (Tú y yo pasamos por "vacas flacas", entiéndase bien....)

sábado, enero 27, 2007 5:07:00 p. m.  

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