domingo, 29 de junio de 2008

La primera puerta.

Hay personas que pasan por la vida de uno sin hacer ruido. Aparecen en un momento dado para desaparecer después, como una ola de calor africano en verano o de frío polar en invierno. Son como los acontecimientos naturales que tienen que ocurrir porquesí, pero que vistos con perspectiva hacia el pasado desde el presente no han dejado ninguna marca importante, ni buena ni mala, sólo la sensación de haber ocupado mi tiempo (demasiado a veces) y mi esfuerzo por VIVIR.

Estoy en una fase en la que quiero cerrar las puertas a los sumideros de mi vida, tanto los que tienen forma de persona humana real como lo que yo misma me invento, y escribir este capítulo, que por ahora será el último en el que me acuerde voluntariamente de esta(s) persona(jes) sumidero, creo que puede ser un buen comienzo.

El tiempo y la VIDA me darán o quitarán la razón.

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2 comments:

Blogger AccentLess ha dicho ...

Y si no, se le pegan cuatro hostias...:P

Es broma, es broma...

Poniendonos (parcialmente) mas serios, yo nunca he creido que una persona pueda "no dejar ninguna marca importante, ni buena ni mala, sólo la sensación de haber ocupado mi tiempo (demasiado a veces) y mi esfuerzo por VIVIR."...

Incluso una persona sumidero por excelencia, te enseña a alejarte en el futuro de posibles nuevos sumideros... yo creo que con todo se aprende, y aprender siempre merece la pena.

Y si no, se le pegan cuatro hostias...:P

martes, julio 01, 2008 10:08:00 a. m.  
Blogger Old.Urobros ha dicho ...

Hola Perla,

a veces "no te sigo" o, muy al contrario, "te sigo demasiado". Llego aqui y leo lo que has puesto y me quedo con la sensación de no saber si estás tratando temas similares a los que yo mismo tengo en la cabeza o simplemente creo que lo haces. Con un poco más de poesía en mis palabras: Leo las tuyas y son como un espejo en el que veo reflejadas muchas de las "luces" que van por mi mente, pero no sé si realmente está la imagen ahí, o soy yo mismo quien la está poniendo.

Imagino que es irremediable el parecido a veces, cuando empleamos metáforas y símiles tan trillados como "puertas y sumideros".

Por mi experiencia reciente y la que no lo es tanto, las puertas deben cerrarse y mejor antes que después, ya que si las dejamos demasiado tiempo abiertas, algo de nosotros puede salir por ella y el momento que salga se perderá irremediablemente. Aunque reconozco que a veces cuesta tanto cerrar la puerta que aunque el coste a la larga sea mayor, el de no hacerlo, no lo hacemos hasta que ya no queda nada que cerrar sino que debemos eliminar el hueco de la puerta añadiendo "ladrillo y hormigón". Haciéndolo desaparecer uniéndolo a las paredes. Me repito: creo que debemos cerrar las puertas y mejor pronto. Ten en cuenta que una puerta cerrada siempre puede abrirse de nuevo (porque también te digo que no pierdas las llaves) sólo basta con que llamen, aunque algunos deberán aporrear muy fuerte.

Un Abrazo PRECIOSA Perla.

martes, julio 01, 2008 10:10:00 a. m.  

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