Hace tiempo que ya no te veo ...

Hace mucho que Gabrielle no me deja asomarme a su ventana (se está volviendo muy celosa con su intimidad y desconfiada a la vez) así que no puedo contar nada suyo … pero tengo un par de ideas rondando la cabeza que no sé muy bien como modelarlas.

Una trata de lo inútil que es arrepentirse de algo ‘malo’ que uno hace. Me refiero a las situaciones en las que uno se promete a sí mismo que va a dejar de fumar, o que no va a beber más, o que va a hacer la cama todos los días antes de salir de casa … y hace esto por alguna razón: para eliminar ese sucio vicio que avergonzaría a mis antepasados y ensucia mis dedos, para no hablar más de la cuenta delante de quien no debe, sencillamente para ser más ordenado … Y se intenta, pero no se consigue. La tentación ronda y uno es débil. Y al día siguiente se siente mal, muy mal. Y esto no sirve para nada, es total y completamente absurdo, una farfolla que impide que la intención primera llegue a algún puerto.

La otra me vino a la mente ayer mientras conducía de camino a casa. Estaba medio lloviendo y salió el sol, volví a ver el arco iris !! Ya ni recordaba la última vez que lo había visto … es tan bonito, tan transparente, tan luminoso, tan lleno de vida ! Cualquiera diría que se trata sólo de unas gotitas de agua atravesadas por un rayo de luz. Me hizo sentirme afortunada. Y eso no pasa a menudo.

Limpiaré el catalejo con el que espío a Gabi, pero no puedo prometer que ella me permita ver algo.